79 Había dejado Apolonio mil jinetes ocultos a espaldas de ellos.
80 Se dio cuenta Jonatán de que a sus espaldas había una emboscada.
Estos rodearon su ejército y dispararon tiros sobre la tropa desde la mañana
hasta el atardecer;
81 pero la tropa se mantuvo firme, como lo había ordenado Jonatán, y
los caballos de los enemigos se cansaron.
82 Sacó entonces Simón su ejército y atacó a la falange - pues ya la
caballería estaba agotada - la derrotó y puso en fuga,
83 mientras la caballería se desbandaba por la llanura. En su huida
llegaron a Azoto y entraron en Bet Dagón, el templo de su ídolo,
para
salvarse.